Cuentos cortos… pero cortos, cortos

Los cuentos cortos cortos son una maravilla  por su pequeña extensión y gran contenido. Pueden hacer que nuestra imaginación explote en un millón de caminos que pueden seguir a esa pequeña historia. El clásico que se cita muchas veces es El dinosaurio, de Augusto Monterroso que cita nuestra compañera Inmaculada más adelante. Pero a mí me gusta más éste de Fredric Brown, un escritor de ciencia-ficción del siglo XX con una imaginación desbordante y un estilo muy personal: "El último hombre sobre la Tierra estaba sentado solo en una habitación. De repente, tocan a la puerta." Os proponemos algunos seleccionados…